We Love God!

God: "I looked for someone to take a stand for me, and stand in the gap" (Ezekiel 22:30)

In many churches today the congregation rules the leaders. This sort of government is foreign to the New Testament.
John MacArthur

Why do any of us get upset or tense when confronted? Why do any of us activate our inner lawyer and rise to our own defense? Why do any of us turn the tables and remind the other person that we are not the only sinner in the room? Why do we argue about the facts or dispute the other person’s interpretation. We do all of these things because we are convinced in our hearts that we are more righteous that how than we are being portrayed in the moment of confrontation. Proud people don’t welcome loving warning, rebuke, confrontation, question, criticism, or accountability, because they don’t feel the need for it. And when they do fail, they are very good at erecting plausible reasons for what they said or did, given the stress of the situation or relationship in which it was done.
Paul David Tripp

Bible – Read the Español – (Spanish Modern) Rut Chapter 2:1-23 Online.

Index: Español – (Spanish Modern)

 

Rut 2

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2:1 Noemí tenía un pariente de su marido, un hombre de buena posición de la familia de Elimelec, el cual se llamaba Boaz.

2:2 Y Rut la moabita dijo a Noemí: –Permíteme ir al campo para recoger espigas tras aquel ante cuyos ojos yo halle gracia. Y ella le respondió. –Ve, hija mía.

2:3 Ella fue y al llegar espigó en el campo tras los segadores. Y dio la casualidad de que la parcela del campo pertenecía a Boaz, que era de la familia de Elimelec.

2:4 Y he aquí que Boaz llegó de Belén y dijo a los segadores: –¡Jehovah sea con vosotros! Ellos le respondieron: –¡Jehovah te bendiga!

2:5 Y Boaz preguntó a su criado encargado de los segadores: –¿De quién es esa joven?

2:6 El criado encargado de los segadores le respondió diciendo: –Ella es la joven moabita que ha vuelto con Noemí de los campos de Moab.

2:7 Me ha dicho: “Permite que yo espigue y recoja entre las gavillas, detrás de los segadores.” Ella vino y ha estado desde la mañana hasta ahora. No ha vuelto a casa ni por un momento.

2:8 Entonces Boaz dijo a Rut: –Escucha, hija mía: No vayas a espigar a otro campo, ni te alejes de aquí. Aquí estarás junto con mis criadas.

2:9 Mira bien el campo donde siegan, y síguelas; porque yo he mandado a los criados que no te molesten. Cuando tengas sed, ve a los depósitos y bebe del agua que sacan los criados.

2:10 Ella se postró sobre su rostro, se inclinó a tierra y le dijo: –¿Por qué he hallado gracia ante tus ojos, para que tú te hayas fijado en mí, siendo yo una extranjera?

2:11 Boaz le respondió diciendo: –Ciertamente me han contado todo lo que has hecho por tu suegra después de la muerte de tu marido, y que has dejado a tu padre, a tu madre y la tierra donde has nacido, y has venido a un pueblo que no conociste previamente.

2:12 ¡Que Jehovah premie tu acción! Que tu recompensa sea completa de parte de Jehovah Dios de Israel, ya que has venido a refugiarte bajo sus alas.

2:13 Ella dijo: –Señor mío, halle yo gracia ante tus ojos, porque me has consolado, y porque has hablado al corazón de tu sierva, aunque yo no soy ni como una de tus criadas.

2:14 Boaz le dijo a la hora de la comida: –Acércate aquí, come pan y moja tu bocado en el vinagre. Entonces ella se sentó junto a los segadores, y él le dio grano tostado. Ella comió hasta que se sació, y le sobró.

2:15 Cuando ella se levantó para espigar, Boaz mandó a sus criados, diciendo: –Que recoja espigas también entre las gavillas, y no la avergoncéis.

2:16 Más bien, sacad para ella de los manojos y dejad que las recoja, y no la reprendáis.

2:17 Rut espigó en el campo hasta el atardecer y desgranó lo que había espigado, y he aquí que había como un efa de cebada.

2:18 Lo tomó y se fue a la ciudad, y su suegra vio lo que había espigado. También sacó lo que le había sobrado de la comida después de haberse saciado, y se lo dio.

2:19 Entonces su suegra le preguntó: –¿Dónde has espigado hoy? ¿Dónde has trabajado? ¡Bendito sea el que se haya fijado en ti! Ella contó a su suegra con quién había trabajado y dijo: –El hombre con quien he trabajado hoy se llama Boaz.

2:20 Y Noemí dijo a su nuera: –¡Sea él bendito de Jehovah, pues no ha rehusado su bondad ni a los vivos ni a los que han muerto! –Noemí le dijo después–: Aquel hombre es nuestro familiar. Él es uno de los parientes que nos pueden redimir.

2:21 Rut la moabita dijo: –Además de esto, me ha dicho: “Permanece con mis criados hasta que hayan acabado toda mi siega.”

2:22 Noemí respondió a Rut su nuera: –Está bien, hija mía, que salgas con sus criadas, para que no te vayan a molestar en otro campo.

2:23 Estuvo, pues, junto con las criadas de Boaz espigando hasta que terminó la siega de la cebada y la siega del trigo. Y ella vivía con su suegra.