Index: Español – (Spanish Modern)

 

Mateo 3

[1]
[2]
[3]
[4]
[5]
[6]
[7]
[8]
[9]
[10]
[11]
[12]
[13]
[14]
[15]
[16]
[17]
[18]
[19]
[20]
[21]
[22]
[23]
[24]
[25]
[26]
[27]
[28]

3:1 En aquellos días apareció Juan el Bautista predicando en el desierto de Judea

3:2 y diciendo: “Arrepentíos, porque el reino de los cielos se ha acercado.”

3:3 Pues éste es aquel de quien fue dicho por medio del profeta Isaías: Voz del que proclama en el desierto: “Preparad el camino del Señor; enderezad sus sendas.”

3:4 Juan mismo estaba vestido de pelo de camello y con un cinto de cuero a la cintura. Su comida era langostas y miel silvestre.

3:5 Entonces salían a él Jerusalén y toda Judea y toda la región del Jordán,

3:6 y confesando sus pecados eran bautizados por él en el río Jordán.

3:7 Pero cuando Juan vio que muchos de los fariseos y de los saduceos venían a su bautismo, les decía: “¡Generación de víboras! ¿Quién os enseñó a huir de la ira venidera?

3:8 Producid, pues, frutos dignos de arrepentimiento;

3:9 y no penséis decir dentro de vosotros: ‘A Abraham tenemos por padre.’ Porque yo os digo que aun de estas piedras Dios puede levantar hijos a Abraham.

3:10 El hacha ya está puesta a la raíz de los árboles. Por tanto, todo árbol que no da buen fruto es cortado y echado al fuego.

3:11 Yo, a la verdad, os bautizo en agua para arrepentimiento; pero el que viene después de mí, cuyo calzado no soy digno de llevar, es más poderoso que yo. Él os bautizará en el Espíritu Santo y fuego.

3:12 Su aventador está en su mano, y limpiará su era. Recogerá su trigo en el granero y quemará la paja en el fuego que nunca se apagará.”

3:13 Entonces Jesús vino de Galilea al Jordán, a Juan, para ser bautizado por él.

3:14 Pero Juan procuraba impedírselo diciendo: –Yo necesito ser bautizado por ti, ¿y tú vienes a mí?

3:15 Pero Jesús le respondió: –Permítelo por ahora, porque así nos conviene cumplir toda justicia. Entonces se lo permitió.

3:16 Y cuando Jesús fue bautizado, en seguida subió del agua, y he aquí los cielos le fueron abiertos, y vio al Espíritu de Dios que descendía como paloma y venía sobre él.

3:17 Y he aquí, una voz de los cielos decía: “Éste es mi Hijo amado, en quien tengo complacencia.”